El Paisaje Cultural Cafetero, ha sido declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. |
Definición
Un paisaje cultural es el resultado de la interacción en el tiempo de las personas y el medio natural, cuya expresión es un territorio percibido y valorado por sus cualidades culturales, producto de un proceso y soporte de la identidad de una comunidad.
Ejemplo de Paisaje cultural en Colombia
Es el Paisaje Cultural Cafetero, que ha sido declarado
Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Este paisaje comprende una extensión
de 141.120ha que incluye una red de 18 centros urbanos y 6 paisajes, y
representa una tradición centenaria consistente en cultivar café en pequeñas
parcelas de bosque alto.
El paisaje cultural cafetero de Colombia está constituido
por cuatro departamentos: Caldas, Quindio, Risaralda y Valle del Cauca y varios
de sus municipios.
Importancia del Paisaje cultural en Colombia
Identidad cultural: El Paisaje Cultural Cafetero de
Colombia es un ejemplo excepcional de un paisaje cultural productivo y
sostenible que es único y representativo de una tradición que es un fuerte
símbolo para las áreas de cultivo de café en todo el mundo.
Turismo: Los paisajes culturales cafeteros son un
imán para el turismo nacional e internacional. Los visitantes son atraídos por
la belleza escénica de las colinas ondulantes cubiertas de cafétales, así como
por la experiencia auténtica de sumergirse en la vida rural y conocer de cerca
el proceso de cultivo, cosecha y producción de café. El turismo relacionado con
el café ofrece oportunidades para el ecoturismo, el agroturismo y el turismo
cultural, impulsando la economía local y nacional al fomentar la inversión en
infraestructuras turísticas, alojamiento, restaurantes y actividades
relacionadas.
Identidad Cultural: Los paisajes culturales cafeteros
están profundamente conectados con la identidad de Colombia. El café ha sido
parte integral de la cultura y la historia del país durante más de un siglo, y
estos paisajes representan esa herencia cultural. Las tradiciones, costumbres y
formas de vida de las comunidades cafeteras han influido en la forma en que los
colombianos se ven a sí mismos y cómo son percibidos en el mundo.
El Paisaje Cultural Cafetero es importante para Colombia en
términos de turismo, economía nacional e identidad cultural. El turismo en la
región se beneficia de la belleza natural y cultural del paisaje, así como de
la arquitectura distintiva y la historia del cultivo del café. La producción de
café es una fuente importante de ingresos para la economía nacional y está
profundamente arraigada en la cultura y las tradiciones de la región. Además,
el Paisaje Cultural Cafetero es un testimonio del patrimonio cultural y natural
único de Colombia y contribuye a la identidad cultural del país.
Características del paisaje cultural
El paisaje cultural es una forma de entender la relación
entre el ser humano y la naturaleza, que se expresa en un territorio con
características culturales distintivas. El paisaje cultural tiene las
siguientes características:
- Es el resultado de la interacción en el tiempo de las
personas y el medio natural.
- Es un territorio percibido y valorado por sus cualidades
culturales, producto de un proceso y soporte de la identidad de una comunidad.
- Combina de manera armoniosa la naturaleza con el accionar
humano.
- Es un legado que revela aspectos históricos y culturales
de un territorio, acompañado de un tesoro natural irrecuperable en caso de no
conservarlo.
- Es importante para una región desde diferentes aspectos:
económicos, pedagógicos y recreativos.
- Genera un sentido de pertenencia en la comunidad que habita el paisaje cultural.
Como se cuidan los paisajes culturales en Colombia
La salvaguardia de los paisajes culturales emerge como una
temática de importancia insoslayable, no solo en Colombia sino en el ámbito
global. En la nación colombiana, la Constitución Política de 1991 erige como un
deber del Estado y de la ciudadanía proteger las riquezas inherentes a su
cultura y naturaleza. Paralelamente, el Patrimonio Cultural de la Nación se
encuentra bajo la tutela gubernamental, respaldado por legislaciones que
delinean los mecanismos para su adquisición ante la posesión privada, al mismo
tiempo que regulan los derechos específicos de las comunidades étnicas
presentes en zonas de relevancia arqueológica.
De igual modo, se erigen leyes específicas encaminadas a
resguardar el patrimonio cultural. La Ley 1185 de 2008, como ejemplo
paradigmático, enriquece y complementa la Ley 397 de 1997, adicionalmente a
establecer otras disposiciones relevantes. A su vez, Colombia, en su búsqueda
por garantizar una protección amplia y coherente, ha ratificado convenios
internacionales de significado crucial. Entre ellos destaca el Pacto de Roerich
(Ley 36 de 1936), orientado a la falta de instituciones de índole artística y
científica, así como monumentos históricos. Aunado a esto, la ratificación de
la Convención para la Protección del Patrimonio Cultural y Natural (Ley 45 de
1983) consolida el compromiso de Colombia con la protección de su patrimonio
tanto cultural como natural.
En suma, la normativa y los tratados internacionales
promovidos por Colombia, junto con su enfoque constitucional y legal, reflejan
un firme propósito de resguardar los tesoros culturales del país. La protección
de los paisajes culturales trasciende lo meramente normativo, estableciéndose
como una expresión profunda del compromiso de la nación con su identidad
histórica y su responsabilidad hacia las futuras generaciones.
Otros paisajes culturales no reconocidos en Colombia
Colombia es un país con una rica diversidad cultural y natural, y cuenta con muchos paisajes culturales que aún no han sido reconocidos oficialmente por la UNESCO. Algunos de estos paisajes culturales no reconocidos incluyen lugares como:
- San Gil,
- Capurganá,
- Parque arqueológico de San Agustín,
- Salento, Mompox,
- Desierto de la Tatacoa,
- La Guajira entre otros.
Estos lugares son ricos en historia, cultura y belleza
natural, y son un testimonio de la riqueza y diversidad del patrimonio cultural
de Colombia. Cada uno de estos lugares tiene su propia historia y tradiciones
únicas, y ofrece una visión fascinante de la cultura colombiana.
Algunos ejemplos de paisajes culturales en otros países
La Quebrada de Humahuaca en Argentina, donde la herencia cultural se combina con la belleza natural.
El Valle de Viñales en Cuba, donde aún se emplean técnicas agrícolas tradicionales.
El Qhapaq Ñan o camino inca, que atraviesa varios países sudamericanos y muestra la ingeniería y organización de los antiguos incas.
Los paisajes culturales son importantes porque son una expresión de la identidad de un pueblo. Reflejan su historia, su cultura y su forma de vida. También son importantes desde el punto de vista económico, ya que pueden atraer turistas y generar empleos. Además, los paisajes culturales pueden ser utilizados para la educación y la recreación.
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